El dictamen había sido consensuado y emitido por la comisión de Gobierno que preside Daniel Píccolo y se oponían abiertamente Omar López y Adriana Storni, quienes no quieren que vecinos se sienten en el recinto a exponer proyectos o denuncias. Ambos ediles manifestaron en varias oportunidades que “los vecinos hablan por sus representantes” y que no hace falta que ocupen una banca que, según habría manifestado López era “anticonstitucional”, y que para llegar adonde estaban ellos había que “hacer un largo camino y sólo se llega por medio del voto. La banca sólo tiene que ser ocupada por concejales”. Celosos de sus puestos, hasta se enojaron con el nombre y se lo cambiaron porque “las bancas son 24” y no hay por qué agregar una más. Algunos otros concejales, como Martín Medina, han dicho que tampoco creen que los vecinos deban estar allí, “porque para representarlos estamos nosotros”, pero que, no obstante, iba a apoyar el proyecto de
participación vecinal.
Pese al dictamen que se obtuvo después de innumerables correcciones, agregados y reformas de sus artículos, hubo ediles que no quedaron conformes y pidieron que volviese a comisión para ser estudiado nuevamente. Dicen que en las correcciones hay “desprolijidades” que deberán ser eliminadas, dando lugar a una reglamentación clara sobre la participación de las entidades que soliciten ocupar ese lugar a partir del año próximo, que serán corregidas para su aprobación en la sesión del 10 de diciembre en la que se tratará, además la Ordenanza Fiscal Impositiva que regirá el ejercicio 2015.
A la hora de aprobar un contrato de alquiler de un local para poner el archivo de expedientes hubo empate y el presidente Héctor Bonfiglio puso el voto positivo doble. La oposición lo votó negativamente porque, según Storni, “lo consideramos innecesario. Tenemos espacios de sobra sin utilizar para construir un archivo, por mucha menos plata”. El alquiler es por tres años y a un costo de $700.000.
Un expediente obedece a una presentación que hicieron trabajadores del hospital Narciso López, hoy acéfalo, y que contiene además la versión del director Antonio Brunetti hoy de licencia, sobre el conflicto entre trabajadores y autoridades del nosocomio. Este expediente solicita al intendente su intervención frente a las autoridades provinciales para que cubran la acefalía y resuelva el conflicto. Según la concejal Stella Maris García “la idea era girarlo directamente al ministro de Salud pero el FV no quiso. Dicen que no podemos hacerlo sino por vía del intendente. Lo importante es que se solucione porque los enfermos quedan en el medio, sin atención”.
Además se envió nuevamente a comisión el expediente que contaba con dictamen y que establecía normas de habilitación para agencias de remises “porque piden poner publicidad en lunetas, puertas y parabrisas y eso no está establecido en la Fiscal Impositiva”, argumentó Jorge Montero.
En la sesión, y luego de debates y provocaciones partidarias -iniciadas por Omar López- logró aprobarse el cambio de nombre para la avenida Rodríguez, que pasará a llamarse Presidente Raúl Ricardo Alfonsín.
Sin embargo, no hubo discusión sobre el homenaje que le rindieron a Saúl Ubaldini, con colocación de placa en el salón contiguo al recinto. La esposa y la hija del líder gremialista agradecieron el gesto e hicieron referencia al gremialista Bonfiglio y la edil Mabel Gagino, quien llevó la propuesta al bloque del FV, que fue aceptada y presentada en conjunto. El acto se abrió con el himno nacional y se cerró con la marcha peronista.
Marta Santos