No es casualidad que el director principal del Hospital Narciso López, Antonio Brunetti, cuando recientemente sufrió un ataque, haya pedido que los trasladen urgente a la clínica privada Itoiz en Avellaneda; y que hace un par de días, su segundo, Juan Moretti, al sufrir un ataque, se fue a atender y a internar a un sanatorio porteño.
El motivo por el que huyen de su propio Hospital Vecinal, es una mugre.
La prueba de esto: anteayer, en la oficina de Tesorería, el olor a podrido era insoportable. Cuando revisaron hallaron que el origen del olor nauseabundo era una rata muerta, de colosales dimensiones (foto).