De los dos toboganes que tenía el velódromo municipal Eva Perón, ya no queda ninguno. El más grande -de más de cuatro metros de altura- fue incendiado hace unos dos meses, y durante este fin de semana los vándalos fueron por el más chico de que como se verá no quedo nada: destrucción total, gracias a los pirómanos.
¿No hay vigilancia en el parque?