El ministro de Salud de la provincia, Alejandro Collia (foto) viajará esta semana a Washington para reunirse con las autoridades de la Organización Panamericana de la Salud, y según informa el sitio web del ministerio, el funcionario expondrá, entre otras cuestiones, “sobre varias iniciativas que ya se llevan a cabo en distritos bonaerense como la producción pública de medicamentos”. Evidentemente complacido con su gestión, el ministro destacó que “la idea es compartir nuestras experiencias en la provincia más grande y poblada del país para intercambiar ideas y, eventualmente, trasladar nuestras iniciativas a otros lugares de América donde puedan ayudar a mejorar la calidad de vida de la población”.
La pregunta que queda flotando es si el ministro está hablando de otra provincia o si efectivamente se está refiriendo a la misma que bajo su gestión se caracterizó por los faltantes de medicamentos cuya provisión se encuentra legalmente exigida; la falta de insumos en los hospitales; o la falta profesionales que atiendan en los centros de salud.
Por supuesto, los pacientes oncológicos se indignaron al leer semejantes declaraciones, ya que no sólo padecen la falta de drogas para cubrir sus tratamientos sino que también deben penar cada vez que necesitan realizarse un estudio o práctica profesional, perdiendo de esa forma un tiempo vital para atacar sus enfermedades.
Como publicó La Defensa en notas anteriores, si no fuera por los amparos presentados ante
la justicia, muchos pacientes no habrían recibido la medicación y las consecuencias podrían haber sido trágicas.
Queda claro que las declaraciones de Collia, además de ser inoportunas y de pésimo gusto, demuestran una enorme desaprensión del ministro respecto a la gente que sufre a diario su incapacidad para resolver los problemas de salud de los bonaerenses. ¿O acaso será que el ministro desconoce, al igual que el concejal Omar López, los padecimientos sanitarios de la población?
