Se trata del jefe Daniel Muller (foto) al que hace rato le viene siguiendo la pista la subsecretaria de Políticas de Género, Mariela Fernandez. A esta funcionaria algunas empleadas se animaron a decirle que sus quejas por acoso elevadas a la Secretaría de Salud, rebotaban cuando llegaba al secretario Daniel Nucher, quien arreglaba las cosas con algún pase o carpetas médicas para las denunciantes. Es que Muller milita en la agrupación política que preside Nucher.
Pero ahora, que las nueve denuncias llegaron a Fiscalía, y luego del mentado escándalo, a Muller lo pusieron a disponibilidad de Personal y allí lo derivaron al Corralón, mas hete aquí que hoy, ante los ojos aterrados de sus denunciantes, el hombre estaba muy campante, fumando y charlando con sus amigos en Medicina Preventiva.