Para consensuar una agenda de temas locales
Hoy, el concejal massista Heriberto Deibe (foto) de La Juan Domingo, le entrega en mano a todos los presidentes de bloques en el deliberativo y a los presidentes de partido con representación local, una carta convocándolos a consensuar una agenda legislativa para tratar temas locales.“Creo que el año 2014 es una
oportunidad para priorizar el bien común de los habitantes de Lanús, y la única manera de gobernar es haciéndolo y para eso también estamos los concejales desde el poder legislativo”, explica Deibe.
A criterio de La Defensa, esta es la parte principal de la carta, con un último párrafo quer parece hecho a medida para retrucarle a otro edil massista, como es Nicolás Russo:
“Tenemos la posibilidad y la responsabilidad de coordinar una Agenda que, al hacerse pública y visible, nos acerque a la sociedad que representamos y aleje a este legislativo de acuerdos ocultos y espurios que nada tienen que ver con la demanda de transparencia social. La mejor forma de salvar a la política como servicio es ponerla a disposición de sus destinatarios: los ciudadanos.
“Considero que esta Agenda nos permitirá fortalecer al distrito en las negociaciones que tengamos que llevar adelante con los gobiernos nacional y provincial para satisfacer las demandas justas y crecientes de nuestra población. Asimismo, si el estado quiere realmente cumplir su rol principal que es ser prestador de servicios, esta agenda legislativa debe enfocarse en devolverle a nuestro pueblo lo que con tanto sacrificio le aporta.
“No desconozco que una vez que nosotros, como legisladores y representantes de partidos, lleguemos al consenso de una agenda, debemos acercarnos a los legisladores oficialistas,
pues la verdadera defensa de la Institucionalidad es complementar al ejecutivo con el Concejo Deliberante de Lanús, porque gobernabilidad es armonía en las decisiones de gobierno y consenso social de las mismas.
“La gobernabilidad (con la que se nos corre, desde el municipio), no debe ser victimización ni acuerdo de cúpulas o estructuras políticas de negocios. La gobernabilidad se garantiza con conductas honradas hacia el pueblo, no con complicidad y encubrimiento.
“Cuando se habla de “gobernabilidad en riesgo” se lo hace desde dos supuestos: 1) el que tiene el poder lo tiene para sí mismo y 2) la oposición lo busca para la revancha.
¿Cómo salimos de esta lógica nefasta?
Hagamos lo que debemos hacer. Hagamos lo que el pueblo de Lanús nos demanda. Volvamos a la idea de la política como servicio y veremos como la tan meneada gobernabilidad llega por sí misma”.