El brindis findeañero se llevó a cabo en la Secretaría de Salud, y fue presidido por su titular Daniel Nucher y por el intendente Darío Diaz Perez, refrescados todos por un potente equipo de aire acondicionado. Fue el viernes al mediodía, mientras la gente afuera hervía literalmente, sin luz, sin agua en muchos casos, sin ambulancias en las calles, con los cuatro hospitales rodantes que tiene el municipio guardados bajo llave, y sin insumos en las unidades sanitarias porque el martes pasado, se robaron todo lo que recién había llegado de provincia del subdepósito de la calle Melo.
¿Se habrán acordado de brindar además por los enfermos oncológicos abandonados a su suerte durante 2013?