domingo, 8 de diciembre de 2013

En la limpieza del Riachuelo actúa el “tortuchorro”

por Lisandro Martínez*

lisandromartinez47@yahoo.com.ar

Agazapados tras “Limpiemos el Riachuelo”, funcionarios protegidos desde la cúpula del Poder Judicial malversan créditos internacionales cuya razón de ser es asegurar la condena de pagar a perpetuidad una deuda externa contraída por agentes nativos de la banca internacional. Los defraudadores de la burguesía llamada “nacional” han demostrado por su voracidad que sólo son competentes para el peculado y la exacción, cuyas víctimas finales son quienes viven del trabajo propio.
  Los “intelectuales” que defienden –con pocas luces- los manejos delictivos del poder político son rehenes de la dependencia económica del gobierno y, por lo tanto, no tienen condiciones de dilucidar entre realidad y fantasía y lejos están de interpretar la vieja tautología de Aristóteles: “La verdad es la única realidad”. Foster, González y demás integrantes del colectivo Carta Abierta siguen defendiendo al gobierno garante del saqueo de Chevron/Repsol, acuerdan con el incremento infinito del precio de los combustibles y pasaron de ser enemigos del ajuste a embarcarse en el devaluacionismo más ramplón contra el pueblo que les bancó su educación como intelectuales. 
   ¿Es posible que el nacionalismo burgués termine siendo funcional al imperialismo que dice combatir? La respuesta es triplemente sí. Sucedió en 1955 cuando la dirección política se piantó sin presentar batalla, en 1976 cuando pavimentó el camino al golpe genocida y en la actualidad, entregada a los buitres y acumulando fortunas personales con el hambre popular. 
  Los intelectuales oficialistas llegaron a la ceguera total y a un punto sin retorno, donde no pueden escuchar a su compañero de ruta León Gieco cuando canta en La colina de la vida:
“La realidad baila sola en un entierro, la realidad baila sola en la mentira”.
  En Tecnópolis, un emprendimiento donde el gobierno pretende mostrar adelantos científicos basados en la investigación, en evidencias y sostenido por los argumentos de pruebas y contrapruebas, se montó “un cachivache nacional y popular” atado con alambre y sin ninguna prueba que avale semejante relato, muy por detrás de las fabulas bíblicas.  
  Se presentó una navegación virtual por el Riachuelo, con ayuda de tecnología de última generación y la animación de un tortugo que presenta los avances de la gestión corrupta  desenvuelta desde la “progre” Picolotti hasta el derechista Mussi, quien se refugió en la Cámara de Diputados por las dudas no salga la reforma del Código Civil y Comercial que permita a los funcionarios más comprometidos con el robo y las estafas eludir la responsabilidad en cuanto a la malversación de los créditos internacionales. 
  Elegir como presentador de la navegación virtual al animal más lento del planeta es todo un señalamiento de la visión que tiene la asociación ilícita de su propio funcionamiento. Pero no todo queda en esta salida a escena del inconsciente gubernamental como señalaría Sigmun Freud envuelto en el humo de su pipa, sino que, como siempre sucede, la “inhabilidad” gubernamental tiene un costo de millones depesos que son “desviados del tesoro 
nacional hacia las bóvedas de los funcionarios capitalistas y que termina pagando la clase obrera.  
  El stand de Tecnópolis para contar el cuento del tío sobre el “el saneamiento” costó $20 millones.
  Para realizar esa instalación, la Autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo desvió $33 millones de su presupuesto 2012. El stand diseñado por La Universidad de Tres de Febrero costó $20 millones. (“Denuncian que no es la primera vez que desvían fondos del Riachuelo para otros fines”, La Nación 23/11/2013).
  La Universidad de Tres de Febrero tiene como responsable a un hombre amigo de Carta Abierta, el burócrata sindical Hugo Curto.
  La responsabilidad de la Suprema Corte de Justicia la hemos señalado en otras entregas, ya que designó al juez federal de Quilmes Luis Armella, colocándolo como garante de la aplicación del fallo Riachuelo/Matanza. Esto no puede ser pasado por alto. Nombrar a semejante elemento ejecutor de actividades delictivas de distinta índole pende sobre la responsabilidad de sus superiores quienes no ejercieron ningún contralor.   
  Beatriz Mendoza y otros vecinos que obtuvieron el fallo de la Corte y el abogado Daniel Sallaberry denunciaron “presentamos tres escritos con motivo del desvío de fondos asignados al plan integral de saneamiento y hasta ahora la Corte no ha tomado ninguna medida al respecto. 1) $28 millones al programa Fútbol para Todos en el 2011. 2) $28 millones para Fútbol para Todos en 2012. 3) $ 20 millones para el stand del tortugo. 
   “El presidente de la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar) giró $33 millones que estaban destinados a la limpieza de basurales y programas de salud para Tecnópolis, a fin de construir un stand interactivo del organismo”. Infobae 22/11/2013).
  Y como dice Porky: “Esto no es todo amigos”. 
  “El helicóptero de la PFA filmó una gran cantidad de residuos en márgenes y el espejo del Riachuelo, grandes basurales a cielo abierto - Puente la Noria y Ruta 4”. (Juzgado Criminal y Correccional Federal Nº12 fs  231vta./234)
  El Juzgado Nº12 a cargo del control de obras en Matanza Riachuelo -de acuerdo a Plan de Saneamiento presentado ante la Corte- emitió una resolución en la que denuncia “una serie de inconsistencias, irregularidades administrativas e incumplimientos contractuales”, todo vinculado con la contratación de la empresa S&F Global Serv SRL para limpiar espejo y márgenes de la cuenca Matanza-Riachuelo, por un convenio suscripto por Acumar (Juan José Mussi) y la Municipalidad de Avellaneda (Jorge Ferraresi).
  El juez indica que S&F Global no cumplía con condiciones indispensables para hacer el trabajo por estas irregularidades: 1. Falta de idoneidad, capacidad y estructura de la empresa que actualmente ejerce la acción. 2. Irregularidades administrativas en el trámite de expedientes que culminaron con la selección/preselección de la misma. 3. Falencias en los sistemas de control de cumplimiento de la acción. 4. Inadecuado método de ejercicio de la acción de limpieza de espejo.
  S&F Global embolsó $1.500.000 por no hacer la limpieza.
  ¿No estamos en presencia de una banda con cobertura de seudos intelectuales a la que debemos erradicar?