por Emiliano Bonfiglio*
La gran elección del Frente de Izquierda a nivel nacional, tuvo su expresión también, en nuestro distrito, donde casi hemos alcanzado los 17 mil votos, pasando de un 5% a un 6,2%. Esta votación histórica nos ha dejado a sólo 2 puntos de consagrar un concejal, colocándonos en un cuarto lugar y superando a la lista de De Narváez, cuya significación es mayor considerando que Moyano era parte de esta fuerza política. Hemos quedado muy cerca del Frente Progresista que no ha podido renovar la banca en el concejo.
El concejo “opositor”
El 30% de votos obtenido por el FV, disimula pero no modifica, la situación de derrumbe en la que se encuentra el intendente Díaz Pérez, cuya lista interna obtuvo el 12% en las PASO. La mayor distancia obtenida por el massismo encabezado por Russo (40%) es una confirmación de aquel derrumbe, y un paso más en la operación política de transición pactada frente al fin del kirchnerismo. Con el ingreso de los concejales massistas, junto a los del Pro, con Grindetti a la cabeza, el concejo opositor estará al servicio de reforzar los negocios inmobiliarios a costa de las necesidades habitacionales de los vecinos, y los lazos con el aparato de la Policía Bonaerense que regentean el delito. Ante el fuerte desgaste del intendente y el disgusto de sectores mayoritarios de los vecinos, los concejales “opositores” están anunciando dejarle la presidencia del concejo al oficialismo para garantizar la “gobernabilidad”, preocupados de anticipar un derrumbe definitivo de Díaz Pérez.
La campaña del Frente de Izquierda
Nuestra presencia en los barrios y en los lugares más concurridos del distrito funcionó como
una bancada en la calle, ya que los vecinos se acercaban planteando sus reclamos más apremiantes, desde los desastres en infraestructura (falta de cloacas, calles rotas, etcétera.), desastres ambientales en zonas industriales, hasta la precariedad laboral que sufren trabajadores municipales. Esto puso de manifiesto la necesidad de colocar a la izquierda en el concejo, y que muchos vecinos entendieron que el voto al Frente de Izquierda era el camino para colocar la agenda de reivindicaciones de trabajadores y vecinos en el concejo y en el congreso.
A la campaña se sumaron más de una decena de vecinos, y la fiscalización significó un salto del 40% con respecto a las PASO, alcanzando los 140 fiscales aportados por el Partido Obrero, y alrededor de 200 entre las fuerzas del Frente de Izquierda.
Con un intendente con gran desprestigio entre los vecinos, y un concejo que garantizará la continuidad de los negociados inmobiliarios y el delito organizado por las fuerzas policiales, el Frente de Izquierda impulsará con su presencia en las calles y en los barrios, la organización de los trabajadores y vecinos para enfrentar el ajuste que se viene y levantar las reivindicaciones populares.
(*) Ex candidato a concejal
