Editorial
Nestor Grindetti anda diciendo por todos lados -menos por La Defensa donde se le pidió que lo aclare- que él no dijo que iba a votar el candidato de Darío Diaz Perez como salió titulado en este medio. Y es verdad que él, literalmente, no dijo eso, pero sucede que es tarea ineludible del periodismo, analizar los dichos de acuerdo a los hechos. Y si Grindetti, por radio, le dice a Marta Santos que -con relación a la presidencia del Concejo Deliberante que se renueva en diciembre- el Pro “va a votar lo que decida la mayoría, para preservar la institucionalidad”, inferir que el bloque que él dirige va a votar por un presidente oficialista, es a prueba de tontos.¿Es antojadiza esta interpretación periodística? No, no lo es. Puede ser materia opinable pero no es alocada: Desde ya, sumados los votos del bloque dariista con 9 miembros, y los del Pro con tres, tenemos allí la mitad del cuerpo. ¿Cuánto piensa el más despistado de los lanusenses, que le puede costar a Darío Diaz Perez, comprar una voluntad, en un deliberativo que se parece al Fuerte Apache por los monobloques, y con una bancada massista “partida en pedazos” como dice el propio Grindetti? Esa es la razón de la nota que dice: “Grindetti votará el candidato de Darío”.
Por eso, el líder del Pro Lanús, debería enojarse menos con el periodismo independiente que representa La Defensa en Lanús, y repensar sus objetivos. Tal vez por ese camino se replantee que el distrito votó masivamente en contra de una gestión señalada de inepta y sospechada de corrupción por la mayoría, y tal vez Grindetti entienda que esa es la mayoría a respetar si se quiere defender la institucionalidad.
Los 27.000 vecinos que votarobn a Grindetti, cuyo eslogan fue: “somos la verdadera oposición”, lo hicieron para ponerlo en una banca de concejal a partir de diciembre próximo, y en la “oposición” al gobierno del intendente Diaz Perez.