por Laura Lavandeira*
De chiquita cuando iba al cole en Pompeya al tomar el colectivo las ultimas cuadras de Remedios de Escalada ya me hacían sentir en capital: la avenida ancha, el banco, las luces, los globos del Club de Leones, Casa Pablo con sus electrodomésticos, todo era luz y progreso… Ya hace 30 años que vivo a pasos del puente y en todos estos años se fue deteriorando el lugar hasta caer en un profundo gris que ilustra la zona de posguerra en que se convirtió el barrio en los años del dominio del hobbit maldito. 
Las bocas de tormenta que desconocen lo que es el mantenimiento convirtieron la zona en inundable ante la caída de dos gotas seguidas, el estado de las calles, los cordones inexistentes y las veredas desechas, la falta de luminarias y de patrullaje que hacen que el arrebato a los vecinos sea constante, incrementado por los tres asentamientos que tuvimos que recibir en los últimos 15 años. Ni hablemos de la falta de refugios en las paradas de colectivos .
Pero ojo, ahora hay elecciones, finalmente Darío se dio cuenta que el entorno del puente Alsina pertenece al Municipio de Lanús, entonces vino el despliegue de obras poco planificadas y mal ejecutadas. En la esquina de Remedios de Escalada y Perón decidieron arreglar el conjunto de baches que se extendían hasta la línea de construcción (a falta del
cordón de la vereda). Tuvieron tan poca suerte que pincharon caños de Aysa pero como parece que la agenda de inauguraciones es inamovible a pesar de las interferencias surgidas tiraron el hormigón en la acera e hicieron los cordones de la vereda laguna mediante porque el caño seguía perdiendo.
Conclusión: ¡Cuidado mamis si caminan con criaturas por esta vereda porque quedaron 3 lagunas de importante profundidad. La primera el sumidero fluvial de la citada esquina tapadísimo y desbordando agua sin ninguna tapa, segundo el desagüe cloacal en las mismas condiciones y tercero la laguna artificial producto del caño pinchado!
Pero si logramos seguir caminando entre veredas destruidas podemos ver la mayor de las barbaridades: ¡pintaron toda la zona de distintos tonos de gris! Sobre las paredes destruidas e incluso sobre los afiches que ni siquiera despegaron. Parece que para el intendente no alcanzaba el gris que sentimos en nuestros corazones los vecinos que nacieron o elegimos este barrio residencial -asi reza la categoría en la TSG- para vivir hace ya muchos años.
Por favor Darío, ¿no podías pagarle a pintores para que pinten el monumento histórico más preciado del barrio que lo mamarrachearon los planeros?
¿Era necesario que con todas las necesidades que tenemos los vecinos de Alsina malgastar en hacer dos triangulitos innecesarios de cemento y un monumento no se sabe a qué?
Por último, Dario si sos creyente empeza a rezar porque la barbarie cometida en la construcción de estas obras llenaron de material los desagües y si llega a llover te recomiendo contratar algún ballet acuático al mejor estilo de Ester Williams porque los cantantes que tenés pensado sólo van a cantar: “Glup, glup, glup”.
(*) Dirigente del Pro.
