Una presentación ante el Concejo Deliberante denunciando que en estos años ese órgano municipal nunca autorizó la venta de rifas de los Bomberos Voluntarios de Lanús como lo exige la ley 11349, puede destapar la olla de un escándalo mayúsculo en la administración de los fondos de ese servicio público.
La denuncia dio origen a un pedido de informes que con fecha 13 de septiembre 2013, en el que el concejo le pregunta al ejecutivo por qué no mandó a pedir permiso para la venta de la rifa al deliberativo.
Al parecer, nunca la Sociedad de Bomberos Voluntarios de Lanús, que administra al cuerpo y que preside el empresario de pompas fúnebres, Rafael Baladrón, nunca pidió la autorización municipal para la tradicional venta de esa rifa.
Esta rifa es una cuestión muy oscura: Fuentes oficiosas de esa entidad, le juran a La Defensa, que el empresario que vende el juego, un tal Rubén Cabaleiro, no recauda con sus diez vendedores menos de $2,4 millones por año. Pero al cuartel de Bomberos, el organizador de la rifa le rinde sólo $13.500 por mes, según le relata a este medio un «arrepentido» de esa organización., quien además jura que Cabaleiro está siendo investigado por la AFIP.
Este «arrepentido» señala que la rifa de Bomberos, se compone en total de 10 mil números, «y cada una tiene dos números correlativos, por lo que 5 rifas, a $0 cada una sumaría 200 mil pesos por mes. Así llegamos a la suma de $2,4 millones anuales. Supongamos que sólo se venda la mitad, todavía estamos hablando de $1,2 millones anuales. ¿CUanto ingresa a la sociedad y cuánto se lleva el organizador, y dónde están los asientos de esos fondos?», se pregunta la fuente.
Pero además de la presentación ante el deliberativo de Lanús, el 13 de agosto se ha presentado una denuncia penal ante la UFI 11, por falsificación de firmas en la memoria y balance de la sociedad que administra los bienes de los bomberos, según fuentes tribunalicias, por fiscalía ya desfilaron siete personas para declarar.