A Patricia el alerta de tormenta la mantiene en vilo. Y ahora está en ese estado ante el pronóstico de fuertes tormentas para jueves, todo el viernes y parte del sábado. “Ayer -dice- se cumplió un año cuando me inundé tan mal que perdí desde mi cama hasta electrodomésticos que aún no pude recuperar. Cada alerta de tormentas fuertes sufro terror, pánico. La calle Guarracino, entre Bouchard y Blanco Encalada, se convierte literalmente en un río correntoso que arrastra todo tipo de basuras y líquidos cloacales. Un río de mierda, así se lo digo”. Patricia sabe que esto e debido a “la situación de los desagües de mi barrio, llenos de mugre y sin mantenimiento, le pido que por favor se alerte a las autoridades municipales con tiempo para que procedan y limpien”.
En la foto, Guarracino y Ayacucho en la inundación del 29/10/12.