viernes, 26 de abril de 2013

El 925: jardín abandonado a su suerte


Inició el ciclo lectivo y nuevamente las obras necesarias para que los chicos puedan jugar tranquilamente en el Jardín de Infantes 925 -en Máximo Paz 702- novecientos veinticinco se seguían haciendo esperar. Fue así como un grupo de padres se organizó por el bienestar de sus hijos y pusieron manos a la obra el fin de semana de pascuas y el siguiente para dejar en condiciones el patio de juegos: realizaron tareas de albañilería y pintaron las paredes con pintura que consiguieron por donación, algo de la cooperadora y el resto de los propios bolsillos de quienes fueron a colaborar. 
También se organizaron para juntar algunos útiles escolares, hojas, papeles de colores y demás para que puedan desarrollar las actividades propias del jardín. 
Dicen que no lo arreglaban porque este jardín funciona allí de manera transitoria, pero lo transitorio de esta precaria situación ya lleva más de 10 años. 
  Los padres no entienden qué espera el Consejo Escolar comandado por Roberto Crovella para hacer algo por estos chicos. Porque sostienen que lo que ellos llegaron a hacer son sólo tareas de maquillaje, que realmente en otros sectores las falencias son más graves e incluso denuncian algún caño de gas pinchado, resultante de que el consejo  mandó a arreglar una fuga de gas existente y la solucionaron con caños flexibles de manera provisoria, el contratista afirmó que por falta de pago no continuaría con la obra. 
También dicen que ya Crovella acepto el proyecto para que este patio de juegos pueda ser techado ya que los nenes pueden jugar en el sólo cuando no llueve ni hace ni mucho frío ni mucho calor y no tienen otro patio de juegos para cuando el tiempo no se lo permite