Una antigua empleada municipal de Lanús, asegura lisa y llanamente que a ella no la ascienden a una jefatura -para la que reunió los antecedentes requeridos- porque se enteraron que concurría a las marchas de las Madres de Plaza de Mayo.Stella Maris Turiaci hace 22 años que trabaja en la Municipalidad de Lanús y otro tanto que es afiliada al Sindicato de Trabajadores Municipales de Lanús. Se desempeña en el área de la Secretaría de Salud, inició los trámites en 2003 y bajo el expediente S-54.305/05 presentó todos sus antecedentes para lograr el ansiado ascenso.
Como pasaba el tiempo y no tenía novedades al respecto, se fue a consultar al gremio, durante la gestión del doctor Jorge Munin como secretario de Salud.
Entonces, una compañera de Turiacci con buena vinculación gremial, le confió que lo de ella estaba parado, porque se habían enterado que concurría a la marcha de las Madres de Plaza de Mayo los días jueves.
En efecto, Turiacci tiene a su esposo Ruben Leporace y a su hermano Juan José Turiacci, desaparecidos a manos de la dictadura militar desde 1977. Ella nunca hizo alharaca de su militancia en Madres, pero según su compañera de trabajo, cuando se enteraron “eso no cayó bien en el sindicato”. Ante esto Turiacci presentó el caso a la oficina nacional de Derechos Humanos. Y entonces la trasladaron de la Secretaría de Salud a la unidad de Valentín Alsina.
Luego durante su gestión al frente de Salud municipal, Luis García le recomendó que volviera con su caso al secretario general Miguel Pedelhez, y allá fue Turiacci, y no sólo habló con el uno del STML, sino además con el concejal-sindicalista Daniel Piccolo. Ambos le prometieron trabajar por su caso.
Pero pasó el tiempo y nada. Hasta que un día, el actual mandamás de Salud, Daniel Nucher, le reprochó: “Usted comprometió al doctor Munin con su denuncia a Derechos Humanos”.
Y recientemente, el secretario de Gobierno Juan Carlos Viscelino, le anunció que la iban a poner al frente de una jefatura en forma interina, pero al tiempo se desdijo y le informó que debía concursar si quería su puesto.
“Yo hoy me siento discriminada no sólo por los funcionarios jerárquicos sino además por el secretario general Pedelhez que me discrimina y no me defendió en ningún momento, aunque todo el mundo sabe que se me está negando el derecho que me corresponde”, subraya Turiacci.