por Omar Dalponte*
nuevospropositos@hotmail.comNo podemos permitirnos ser tan inocentes como para creer que el movimiento protagonizado por personal de la Prefectura Naval y de la Gendarmería, con la complicidad de efectivos de la policía bonaerense, de la Marina, de ex militares, de militares retirados y de algunos personajes siniestros vinculados con el terrorismo de estado que reivindican a los asesinos y torturadores, no persigue fines destituyentes ni apunta a sumarse a la escalada de acciones antigubernamentales y antidemocráticas que vienen sucediendo en distintos momentos, principalmente a partir de los sucesos ocurridos en el año 2008 cuando las patronales del
campo tuvieron en vilo al país durante días y días.
Tampoco podemos ser tan estúpidos como para tragarnos que una serie de hechos acaecidos en estos últimos días son producto de la casualidad como: la suspensión del partido Argentina -Brasil por desperfectos en la iluminación; interrupción del servicio de trenes en la línea Roca causando un caos terrible en horas pico; el muy llamativo secuestro de Alfonso Severo que parece tan falso como el de Luis Gerez en el año 2006 ¿ nos acordamos?. Todo sucedido en el mismo día en que efectivos de las fuerzas de seguridad, armados, poniendo como excusa un reclamo salarial se concentraban frente a las sedes de sus respectivas instituciones.
Independientemente de los comentarios que podamos realizar respecto a estos episodios en forma general o en particular, ponemos el acento en el acto de indisciplina y de provocación de los uniformados. No son trabajadores comunes como un albañil, un mecánico o un carpintero. Son personas armadas que cuando se les ha ordenado no vacilaron en rompernos el alma a palos, hacernos morder por lo perros o asfixiarnos con gases lacrimógenos. Más de uno de ellos, de cualquier grado, estarán añorando los tiempos en que con total impumidad reprimían a diestra y siniestra cualquier movilización popular. Ahora extrañan las épocas de horror porque, desde 2003 hasta el presente, las cosas han cambiado notablemente y están obligados a obedecer a un gobierno de la democracia que respeta y hace respetar las libertades públicas más que en cualquier otro tramo de nuestra historia.
Hay mil maneras de reclamar lo que es justo. En la Argentina del presente los miembros de cualquiera de las fuerzas armadas pueden utilizar canales de comunicación para peticionar dentro del marco de los reglamentos militares y de las leyes generales de la República. Recurrir a esta manera de manifestar con las ametralladoras colgadas del hombro o con las armas cortas debajo de los chalecos es absolutamente condenable e inadmisible en quienes tienen la obligación de velar por la tranquilidad del pueblo y no alterarla bajo ningún concepto. Por tal razón quienes incurrieron en semejante disparate deben ser sancionados y según el grado de responsabilidad de cada uno, apartados de sus fuerzas.Aquí no hay lugar para la politiquería barata. O se procede con energía o dentro de algún tiempo se van a animar a rebelarse contra el gobierno y alzarse contra la democracia hasta los miembros de un cuartel de bomberos.
Desde nuestras organizaciones políticas fuimos los primeros - y hasta ahora los únicos- que en Lanús condenamos públicamente este verdadero acto de alzamiento contra la democracia, exhortando a frenar los intentos de golpe de estado que, en definitiva, es lo que pretenden impulsar los protagonistas de esta verguenza uniformada. Ni bien se inició este movimiento claramente destituyente, como Iniciativa Socialista y Concertación FORJA, con la firma de quien escribe esta columna y la de Omar Gabriele, declaramos:
“¡No pasarán! ¡Movilizarse contra el golpe! Integrantes de la prefectura naval y de la gendarmería nacional, con la complicidad de integrantes de la marina, de la policía federal, de la policía de buenos aires, de militares retirados y ex militares vinculados con el terrorismo de estado, han iniciado el día martes 2 del corriente un movimiento con claras intenciones destituyentes que se prolonga hasta hoy miércoles 3 de octubre. este movimiento apunta a promover un golpe de estado en la república argentina y forma parte de la escalada contra el gobierno nacional que vienen realizando los eternos enemigos del pueblo. en esta oportunidad, seguramente, detrás de este intento de golpe de estado se encuentran los sectores concentrados de la economía , los monopolios de los medios de comunicacion y la central de inteligencia de los EEUU (CIA).”
Estas actitudes por parte de las fuerzas armadas de seguridad, con claras intenciones de derrocar a nuestro gobierno aunque sus voceros digan lo contrario, son inaceptables en un estado democrático.
Por lo tanto es necesario actuar, rápidamente y con toda energía, movilizándonos contra los golpistas, en defensa de la democracia y solicitando al gobierno nacional que, más allá del relevo de las cúpulas de las fuerzas respectivas, proceda a la exoneración de los cabecillas y de sus voceros cualquiera sea su grado.
No se puede dejar pasar una agresión de tal magnitud a la democracia!!!..
Solicitamos a todas las compañeras y compañeros que difundan esta declaración y que promuevan reuniones en los barrios y en todos los lugares donde sea posible para unirnos, organizarnos y poner el pecho en defensa de nuestro gobierno y de las instituciones democráticas. Invitamos a todas las fuerzas democráticas de Lanús a reunirnos para discutir un programa de acción inmediata contra el golpe gorila en nuestro país. “
Mucho hemos sufrido los argentinos por no reaccionar a tiempo frente a los intentos de golpe de estado. En nuestra democracia, reconquistada con lucha y alimentada con la sangre vertida por nuestros mártires, es inaceptable que algún miembro de las instituciones armadas, cualquiera sea su rango, se dirija irrespetuosamente a la presidenta de la Nación que, según lo determina la Constitución Nacional, es la comandante en jefe de todas las fuerzas armadas del país. Aquí ha ocurrido esto en reiteradas oportunidades a partir del miércoles 3 del corriente y por tal motivo, que no es menor, los efectivos indisciplinados deben ser exonerados. Y no nos engañemos ni permitamos que nos engañen. No es con medias tintas, con chácharas de comité ni con sesudas opiniones intelectualoides como vamos a profundizar el proyecto nacional ni a afianzar la conducción y permanencia de Cristina Fernández de Kirchner. Es necesaria la movilización popular inmediata y la lucha sostenida para frenar los embates que, seguramente, hasta el 7 de diciembre serán cada vez más fuertes y peligrosos. Hay que ganar las calles y plazas del país para impedir que nos derrumben lo que hemos construído con tanto sacrificio. La presencia activa del pueblo es el arma más eficiente para terminar definitivamente con las aspiraciones golpistas de los grupos dominantes y sus cómplices.
(*) Miembro de Iniciativa Socialista