Limpieza y domicilio del intendente

Convengamos de que somos, como sociedad bastante mugrientos, pero el espacio público es la casa de todos, y aquí también el municipio es el encargado de hacer cumplir las normas. Ejemplo claro son los basurales que inundan las calles; tengo que volver a los carros. Como el municipio o la empresa Covelia no mantiene limpia la ciudad, le pagamos a los carritos para que nos saque la basura que juntamos en nuestros frentes, sabiendo que de ahí van a escasas cuadras a formar parte de otro basural. Covelia para agilizar su tarea, amontona en el medio de las calles la basura, para hacer solo una parada por cuadra. Este manejo no está
permitido, ya que esa manipulación de las bolsas termina con la basura desparramada en la calle. Nadie controla eso.
 Me acuerdo de la cantidad de volantes arrojados a la vía pública, sin ningún tipo de control. En definitiva, éste es el caos a que estamos sometidos como sociedad. Debemos pensar si es normal vivir así, si merecemos éste tipo de vida por ser malas personas o por un fatalismo histórico. Para el final dejo bien asentado que no personalizo el problema en ningún funcionario, ya que la decadencia que describo no es de ésta última gestión, sino que viene de décadas de malas gestiones. Me olvidaba de algo, quisiera saber además de cuantas cámaras de vigilancia tenemos y su ubicación, el domicilio real del señor intendente. Primero porque debe ser un dato público y segundo porque la gente es mala y comenta. Primero lo dieron como viviendo en el barrio cerrado Abril, ahora en Nordelta. Dicho así parecería un chisme de peluquería femenina, pero recordemos que por ley las autoridades locales deben residir dentro del partido donde ejercen.
                                        Eduardo Moltedo