sábado, 15 de septiembre de 2012

La semana en pocas palabras


Informe Económico Semanal del Banco Ciudad

Esta semana se conocieron los datos de inflación de agosto, los cuales se mantienen un escalón arriba de los del año 2011, pese al enfriamiento de la actividad agregada.
Según las estimaciones de ocho fuentes alternativas compiladas por el Congreso, la suba de los precios al consumidor promedió un 1,9% en agosto, en sintonía con la inflación registrada en lo que va del año (1,9% mensual promedio). Esta evolución se tradujo en un alza anual del IPC-Congreso del 24,2%, superior a la de igual mes de 2011 (23,6%).
En agosto, volvió a presionar con fuerza la inflación de alimentos. Según las mediciones
privadas, el encarecimiento de los alimentos y bebidas volvió a ser uno de los principales responsables de la suba de los precios al consumidor, con fuertes incrementos en verduras y otros productos básicos, como lácteos, carnes y panificados. Como resultado, los precios de los alimentos aumentaron en torno a un 25% anual según las mediciones privadas, por encima del alza promedio del IPC.
A lo anterior se sumaron fuertes incrementos en los rubros de atención médica y transporte. En el primer caso, estuvieron vinculados a subas en las cuotas de la medicina prepaga, mientras que en el segundo se capturó el debut de las tarifas sin subsidios para los viajes realizados sin la tarjeta SUBE, además de nuevos aumentos en los combustibles.
Por su parte, manteniendo su abultada (y ya clásica) brecha respecto de las estimaciones privadas y provinciales, el IPC-INDEC registró una suba de 0,9% mensual y 10% interanual. Asimismo, según las estadísticas oficiales, la Canasta básica Alimentaria (CBA) aumentó 1,5% en el último mes, volviendo a computar un menú de menos de $6 por día para no ser considerado indigente. En particular, según el INDEC, el monto de CBA (o la línea de indigencia) trepó a $699 pesos mensuales para una familia tipo, que -repartidos en los 31 días de agosto- arroja un promedio de $22,54 diarios para los cuatro integrantes, es decir, $ 5,63 por día por persona (vale la pena mencionar que las estimaciones privadas de la CBA más que duplican a las estadísticas oficiales).
En este marco de aceleración de la inflación, el Gobierno anunció un ajuste de la Asignación Universal por Hijo (AUH), la cual pasará de $270 a $340 mensuales a partir de octubre, con un aumento del 25,9%.
Ahora bien, este reajuste no alcanzaría a compensar la inflación de alimentos acumulada desde el lanzamiento del programa. Desde octubre de 2009, cuando se lanzó la AUH, la canasta básica alimentaria acumuló un incremento de casi el 100% según las mediciones privadas de precios, mientras que en ese mismo lapso el monto de la AUH fue ajustado en tres oportunidades en un porcentaje menor, desde los $180 originales a los $340 actuales, lo que equivale a un incremento del 89%. En otras palabras, aún después del ajuste de octubre, el monto de la AUH acumulará una pérdida de poder adquisitivo en términos de la canasta básica de alimentos de casi el 10% (pérdida que a septiembre -antes del anuncio- trepaba al 25%).