“No se metan con los ñoquis”

  El viernes, mientras una figura lanusense de nivel nacional, influía en Clarín para darle repercusión al audio destituyente del intendente, el bloque sciolista  solicitaba en la sesión del deliberativo que se tratase sobre tabla un pedido de interpelación a Darío Diaz Perez. No se trató sobre tablas al final, con las excusas más infantiles.
  Mientras Jorge Schiavone se deshacía explicando lo inexplicable en un intrincado comunicado publicado por La Defensa Digital, Carlos Folino, asumía primero una actitud execrable: “No nos metemos en las internas”. Se olvidaba que en Semana Santa del 84, todos los argentinos -no sólo los radicales- fueron a Plaza de Mayo ante un asomo de golpismo. Pero después, dice un prominente dirigente local que Folino le confió: “Yo no voy a votar para que me volteen los contratos”. Y lo mismo le dijo Gabriel Di Masi a un sciolista que le fue a pedir apoyo.
 Y ahí está el quid de la cuestión: a los concejales de Lanús los tiene sin cuidado estas cuestiones de verdadera gobernabilidad, o el festival del derroche municipal que viene revelando La Defensa. Ellos están en otra cosa. En sus negocios.