Por Lisandro Martinez*
Asombra que luego de 11 anuncios desde 2003 a 2011 de planes de construcción de viviendas populares y créditos hipotecarios, que darían solución a 1.504.000 familias, los resultados sean sólo 400.000 viviendas efectivamente terminadas, con construcciones de baja calidad y sobrefacturadas.
Como en todo delito deberían surgir interrogantes ¿a quienes beneficia semejante atropello al Tesoro? ¿Quienes se llenaron los bolsillos con las obras? Los Macri monopolizan la construcción de viviendas para el Estado a través de sus empresas constructoras Socma e Icsa y han sido socios de toda la gestión de Néstor y Cristina. Lo que no debería asombrar es el saludo a cada anuncio de las Cámaras de Construcción, cuyo principal operador es el Grupo Benito Roggio y de la UOCRA, cuyo Sec. Gral. Gerardo Martínez es el proveedor de mano de obra barata e indocumentada que trabaja en condiciones de extrema precariedad.
Si juntamos las laudatorias declaraciones luego de los anuncios del clan Kirchner sobre viviendas populares, armaríamos el mapa de la corrupción y el saqueo al Tesoro Nacional, vía los incumplidos planes de viviendas que fueron pagados con sobrefacturación por adelantado a los contratistas.
Un dato demoledor: "El presupuesto destinado al plan de 400.000 viviendas ascendía a casi $21.277 millones. Hasta el año pasado ya se habían gastado más del 90 % de los fondos -más de $19.000 millones- con menos del 35% de las viviendas terminadas" (V. Grassi). El sobrecosto de las viviendas fue de un 300%, redondeando c/u los $150.000.
Genialmente Marx descubrió una regla, señalando un siglo atrás que ante cada necesidad popular los explotadores realizan negocios millonarios y a la vez estremecedores, que no resuelven sino agudizan la pauperización de las masas. Para reforzar el axioma que revela que es el Capital, el gobierno "Nac&Pop" ante un déficit habitacional de 3 millones de hogares no ha hecho más que negocios para sí y la camarilla amiga y en medio del caos armó, bajo el paraguas de los DDHH, otro cuento del tío llamado perversamente "Sueños Compartidos". Esto que está claro como el agua a los únicos militantes del "campo popular" que no conmueve es a los rentados K, muchos explotando medios de comunicación "alternativos" y otros rezagados cuidando "kioscos". A este sector de ganapanes a costa de vender su conciencia hay que identificarlos porque se irán dando vuelta en medio del derrumbe.
Sueños Compartidos fue un operativo de lavado de dinero donde dejaron sus huellas el Ministerio de Planificación (Devido) y la Secretaría de Obras Públicas (el progresista Fatala). En Lanús, Díaz Pérez junto al contaminador Mussi acordaron que Schoklender/Bonafini construyeran viviendas para los expulsados de las márgenes del Riachuelo.
Sueños logró lo que 7 gobiernos capitalistas (la Dictadura genocida, Alfonsín, Menem, De la Rúa, Puerta, Rodríguez SAA, Caamaño y Duhalde) no pudieron: someter a parte de la dirección de Madres por medio de la corrupción y que sean entusiastas propagandistas, activas partícipes de los negocios del poder y que además la porquería tenga como víctimas a los desposeídos. Kirchner cumplió el sueño de todo explotador, violar a luchadores y que ellos saluden alborozados y aconsejen desde el palco los beneficios que se obtienen al entregarse.
En el obrador de Los Piletones en Villa Soldati, donde comenzó la farsa de "sueños", se resolvió construir sólo 500 viviendas que no cubrían el 20% de necesidades, allí los obreros denunciaron las precarias condiciones de trabajo que luego se comprobaron por la muerte de uno de ellos. En las jornadas del Parque Indoamericano "ejemplificadoras" (como en Barracas), para que nadie saque los pies del plato Macri y los K dejaron correr la sangre y los punteros practicaron caza, golpizas y asesinatos contra los necesitados mientras Schoklender (armado) y Bonafini los denunciaron, en vez de reclamar viviendas para ellos.El disparate 20Schoklender aplicó el abc del "modelo", adjudicándole viviendas a los individuos más descompuestos de Vecinales villeras. Así reforzaba su poder aislando a delegados combativos o aquellos que rehuían el contacto con el narcotráfico o los punteros estatales. "Cuando todos saludaban la mística "constructora" de las Madres, el Partido Obrero denunciaba a Schoklender. Sus secuaces de los Piletones, con Prensa Obrera en la mano, amenazaban con despedir al trabajador que trajera ese periódico al obrador". (Marcelo Ramal)
Sueños formó parte sólida del "modelo Nac&Pop": cooptación de organizaciones sociales para que pongan "la jeta" y finalmente como testaferros respondan si se descubre el plan delictivo. Esa tercerización explotó a desocupados y sin techo y armó como en ferroviarios un régimen con mano de obra barata que rendía no sólo plusvalía sino además le confiscaban parte del salario. Es importante subrayar que en general los Concejos Deliberantes, sabiendo, han mirado para otro lado, por ejemplo la banca del ARI de ese momento en Lanús ya que una de las pioneras en la denuncia de este ilícito fue una diputada de esa fuerza, por lo que se refuerza el toma y daca entre Amore y Díaz Pérez.
Es la hora del control obrero de la cosa pública y del gobierno de los trabajadores.
(*) Miembro del Partido Obrero
Los trabajadores de Sueños Compartidos que fueron defraudados por el gobierno K continúan movilizados (19/6 al MTESS) reclamando derechos laborales, sociales y gremiales. Denuncian que trabajan en el GBA en negro en Cooperativas truchas del Movimiento Evita, sufriendo descuentos arbitrarios, sin obra social, jubilación ni convenio mientras el punteraje busca meter miedo para evitar reclamos.
Los "sueños" y "el modelo" se fueron al carajo.
